xLa recesión económica sigue dejando su huella en el mercado laboral, con una caída del 15% en la cantidad de trabajadores registrados, según el informe de gestión presentado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ante la Cámara de Diputados. A esta preocupante cifra se suma un incremento del 45% en la asistencia por desempleo.El funcionario respondió a una consulta sobre la cantidad de planes sociales financiados por el Estado Nacional, en la que se le solicitaba comparar el número de beneficiarios actuales con los registrados al 31 de diciembre del año pasado.En su intervención, Francos presentó un cuadro detallado elaborado por el Ministerio de Capital Humano, el cual refleja un marcado aumento en los beneficiarios de la prestación por desempleo. Según los datos expuestos, se registró un incremento del 45,5% en la cantidad de personas que reciben este beneficio entre finales de 2023 y el 31 de julio de este año. Este aumento en las prestaciones por desempleo refleja el impacto de la recesión en el mercado laboral, con una mayor cantidad de trabajadores quedando fuera del sistema formal de empleo y recurriendo al apoyo estatal.De acuerdo con los datos oficiales, la cantidad de titulares del seguro por desempleo creció significativamente en los últimos siete meses, pasando de 71.727 a 104.411 personas. Este incremento refleja el deterioro del mercado laboral en diversas regiones del país. “Las provincias de La Rioja, Santa Cruz, Santiago del Estero, Tierra del Fuego y Catamarca son las que presentan los mayores aumentos en la cantidad de prestaciones”, destacó el jefe de Gabinete durante su informe. Estas jurisdicciones, con economías regionales más vulnerables, fueron especialmente afectadas por la crisis, lo que generó un incremento en la demanda de asistencia social.El informe también detalla que el Gobierno incrementó el monto del seguro de desempleo en un 15,9% para el período comprendido entre julio y octubre, como parte de las medidas para paliar los efectos de la pérdida de empleo. Guillermo Francos subrayó que, con este ajuste, la prestación habrá acumulado un incremento total de entre el 300% y el 358% en los primeros diez meses del año. El informe también revela la preocupante disminución de empleos registrados, reflejada en la cantidad de trabajadores que reciben asignaciones familiares por hijo. A fines de diciembre, 5.178.700 personas —incluyendo empleados en relación de dependencia, monotributistas, beneficiarios de prestaciones previsionales y/o del seguro por desempleo— percibían este beneficio. Sin embargo, para finales de julio, esa cifra descendió a 4.406.921, lo que representa una caída del 14,9% en el número de beneficiarios. El dato evidencia el fuerte impacto de la recesión en el empleo formal, con una notable reducción en la cantidad de trabajadores y familias que acceden a esta asistencia. Paralelamente, el Ministerio de Capital Humano liderado por Sandra Pettovello informó la baja del 10% de los inscriptos en el régimen del Monotributo Social, lo que equivale a más de 62.000 personas. La medida se debió a la incompatibilidad con la legislación vigente. Entre los casos detectados, 27.000 beneficiarios tenían empleo registrado y 1.900 eran personas fallecidas. Según el ministerio, estas “bajas por incompatibilidades” generarán un ahorro mensual en el gasto público superior a los 711 millones de pesos.