La letrada Adriana Molina se refirió a la denuncia de una madre por hechos de violencia hacia sus hijos de cinco años por parte de docentes de una guardería de Sáenz Peña y aseveró que el caso “amerita una justicia inmediata y una respuesta ya”.

Adriana Molina, abogada querellante, habló de la denuncia por maltrato infantil a dos alumnos de la guardería Arcoíris de Presidencia Roque Sáenz Peña que se viralizó a través de la publicación de videos en redes sociales y aseguró que pidió a la justicia un procedimiento sumarísimo.

“Estos son hechos humanitarios, donde se han violado derechos y garantías constitucionales de la niñez y de la adolescencia y no debemos dejarlos pasar. Esto amerita una justicia inmediata y una respuesta ya”, sostuvo en declaraciones para radio La Red.

Molina explicó que tras constituirse como abogada querellante, este lunes, solicitó a la Fiscalía N° 1 de Sáenz Peña se le “corra vista e intervención en el expediente”. “El hecho sucedió el 8 de marzo y la mamá realizó la denuncia el 9 ante la División de Violencia Familiar. El 15 de marzo recién fue convocada por la Fiscalía N°1 y yo tomé su caso anoche”, detalló.

“Como querellante voy a solicitar las medidas necesarias, oficio al Ministerio de Educación, si tienen el título correspondiente el personal que está y la cantidad de alumnos”, adelantó la abogada y cuestionó el supuesto descargo publicado desde la Dirección de la guardería, donde se señala “que los niños tenían una conducta no acorde”: “Eso no avala tamaña agresión. Porque sí son conocedoras del nivel inicial, saben que tienen que respetar el desarrollo psicoevolutivo de cada niño. Existe un legajo para cada niño, reuniones individuales, un gabinete psicopedagógico y no se respetó ni derechos del niño, ni convención interamericana, etcétera”, agregó.

La madre de los niños también habló con el móvil de La Red y dijo que son “gemelos y, estando juntos, son muy activos”. “Siempre les notaba marquitas, pero lo notaba como normal, hasta que ese día me alertó una docente de ahí, consulté y ellos me contaron lo sucedido. Pedí cámara y la directora me mandó ciertas partes, pero no me mandó al momento donde encerraron a uno de ellos, que le pegaron y le gritaban”, aseguró sobre la denuncia realizada a principios de marzo.

La mujer sumó a la presentación judicial “un audio de otra persona” que grabó la situación y afirmó que se escuchan “gritos desesperantes de él pidiendo ayuda y se escuchaba como que le pegaban un sopapo. Hasta el día de hoy, que ya pasó más de un mes, les pregunto y ellos exactamente me dicen lo mismo, de que le arañó la cara y le pegó un sopapo”, sostuvo.

En tanto, indicó que no recibió “ninguna explicación” de la directora de la institución y aclaró que sus hijos dejaron de asistir a la guardería tras la denuncia.