xEn octubre, el Gobierno podría celebrar nuevamente una baja en el índice de inflación, que, según estimaciones de consultoras privadas, habría descendido por debajo del 3%. De confirmarse este dato, representaría una desaceleración notable respecto de meses anteriores, en los que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) mantuvo niveles superiores al 4%. Sin embargo, algunos analistas sostienen que esta cifra general podría ocultar desafíos de fondo en la estructura de precios.Según las proyecciones, octubre podría marcar el regreso de la “inflación inducida” al rango esperado, un concepto que incluye el impacto del incremento mensual del dólar oficial y la inflación importada. Estos factores, definidos como requisitos para un posible levantamiento del cepo cambiario, se encuentran en relativa pausa, aunque aún falta asegurar financiamiento externo para llevar a cabo esa medida, algo que el ministro de Economía, Luis Caputo, no parece priorizar en la coyuntura actual.A pesar de este avance en la cifra general, algunos indicadores de mayor estabilidad muestran un panorama más complejo. Consultoras como EcoGo, LyP, C&T, OJF y Price Stats estimaron la inflación de octubre en valores cercanos al 2,7% y 2,8%, mientras que otras, como Equilibra y Analytica, proyectaron índices ligeramente superiores, alrededor del 3,2%. No obstante, varios de estos análisis detectaron un fenómeno relevante: la inflación núcleo, que excluye precios regulados y estacionales, se mantuvo por encima del nivel general, lo cual no sucedía desde principios de año.”La inflación núcleo subió a 3,6%”, señaló C&T, dirigida por María Castiglioni y Camilo Tiscornia, quienes destacaron que esta tendencia responde en parte a la moderación de los ajustes en tarifas, especialmente en servicios públicos como el gas, cuyo precio se redujo en octubre. Tiscornia explicó que aunque los “precios estacionales y los ajustes menos perceptibles de tarifas ayudan a perforar el 3%, la baja de la inflación núcleo es más lenta”.Las estimaciones de otras consultoras refuerzan esta advertencia. Equilibra, por ejemplo, midió un alza del 3,1% en el IPC, aunque su inflación núcleo fue aún mayor, alcanzando el 3,3%. En paralelo, el promedio de estimaciones privadas arrojó un 2,9%, mientras que el Banco Central proyectó una inflación del 3,4% para el mes.Por otro lado, OJF, la consultora de Orlando Ferreres y Fausto Spotorno, registró una inflación mensual de 2,7%, con una variación interanual de 179,8%. Sin embargo, en este caso, la inflación núcleo fue de solo 2,5%, ubicándose por debajo del nivel general, una excepción entre las consultoras privadas.Este comportamiento refleja cómo, aunque las tarifas reguladas moderaron su influencia en el IPC, los precios no regulados continúan impulsando la inflación subyacente. La incógnita de los analistas es si esta dinámica podría seguir acentuándose y revertir la desaceleración lograda en los últimos meses, un desafío que podría condicionar el rumbo de la economía hacia fin de año.(Con información de Infobae)COMENTÁ EN FACEBOOK: HACÉ CLICK ACÁ