xLa crisis en Boca sigue llevándose puestos a varios referentes del club. Tras la renuncia de Diego Martínez, ahora el Consejo del Fútbol de Boca apunta la escoba a los jugadores: difícilmente Sergio Romero y Pol Fernández vuelvan a vestir la camiseta azul y oro. Y en la lista de futbolistas con el ciclo cumplido, hasta podría entrar Marcos Rojo.Juan Román Riquelme se está jugando el puesto y la gente de Boca le exige medidas drásticas. El sábado, después de hablar con Martínez, tuvo una breve charla con el plantel. Y cuando enfrentó a la prensa, el presidente disparó: “Mañana (por ayer) libre, el lunes entrenan. Mañana, los jugadores tienen el día para pensar, para analizar. Es fútbol”, dijo Roman.El único jugador que dio la cara en Córdoba fue Edinson Cavani. El sábado se puso el brazalete de capitán y Román lo quiere como el principal referente del club: “No estamos encontrando buen funcionamiento y en el fútbol suceden estas cosas y no hay recetas: hay que laburar y agachar la cabeza, ser conscientes del momento que estamos viviendo y de lo que significa eso”, sostuvo.Por otro lado, Romero, Pol Fernández y hasta Marcos Rojo están en la cuerda floja, con un pie afuera del plantel. El arquero, que venía en un flojísimo nivel, firmó su salida la tarde del Superclásico, cuando se quiso agarrar a las trompadas con un grupo de plateistas que lo insultó en la puerta del túnel. Con Leandro Brey como garantía, muy a pesar de la derrota en Córdoba, el club avisó que Chiquito tampoco estará contra Argentinos Juniors. Luego, llegará el parate por la fecha FIFA, y nadie puede asegurar que sea tenido en cuenta en la posterioridad, Pol Fernández se fue silbado de la Bombonera en la dura derrota contra River, al salir reemplazado por Milton Delgado. El pibe fue de la partida ante Belgrano y Pol fue suplente. No ingresó y no es un tema menor. La orden de Riquelme es que no juegue más. Cayó como una bomba que haya hecho pública su decisión de no continuar en el club tras la finalización de su vínculo, que se extiende hasta el 31 de diciembre.Por su parte, Rojo con 34 años, tiene más porotos en le debe que en el haber en la institución de La Ribera. Desde su llegada a Boca en 2021, tiene más partidos ausentes que jugados. Apenas disputó 20 de los 45 partidos que duró el ciclo de Martínez. Sus últimas actuaciones, incluida la del Superclásico, dejaron mucho qué desear: se lo vio lento, a destiempo y con violencia innecesaria y desmedida. Contra Belgrano acusó una molestia en el isquiotibial y ni siquiera estuvo en la lista de concentrados.COMENTÁ EN FACEBOOK: HACÉ CLICK ACÁ