xArgentina se encuentra en una posición estratégica para ingresar al mercado global de combustibles sostenibles, aprovechando su destacada producción de soja. En este contexto, la empresa Raizen Argentina, que opera bajo la marca Shell, ha dado un paso importante al obtener la certificación ISCC (International Sustainability & Carbon Certification) para su refinería en Dock Sud. Esta certificación permite a la planta coprocesar aceite de soja para producir diésel de origen renovable, una alternativa clave para reducir las emisiones de carbono.El esquema de certificación ISCC, reconocido a nivel global y alineado con la Directiva de Energías Renovables (RED II) de la Unión Europea y el Reino Unido, asegura la trazabilidad del proceso de producción y el cálculo preciso de la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Gracias a esta certificación, la planta de hidrotratamiento de Dock Sud ha logrado operar de manera sostenida, confirmando una reducción de emisiones de hasta un 80,4% en el ciclo de vida del diésel vegetal, en comparación con su equivalente fósil.CRECIMIENTO EN EL MERCADO DE ESTADOS UNIDOSEl mercado estadounidense también ha experimentado un notable crecimiento en la producción de diésel renovable. Desde 2020 hasta 2023, la capacidad de refinación de este tipo de combustible en Estados Unidos ha aumentado de 800 millones a más de 4.000 millones de galones, con proyecciones que indican que superará los 7.000 millones de galones para finales de la década. Este incremento también ha impulsado la capacidad de molienda de soja, que continuará en ascenso en los próximos años.ARGENTINA, PREPARADA PARA UN FUTURO SOSTENIBLEVictor Castro, Director Ejecutivo de la Cámara Argentina de Biocombustibles, destacó la capacidad de Argentina para aprovechar sus recursos agropecuarios y atender nuevos mercados de biocombustibles, como los HVO o de aviación. Además, subrayó la importancia de promover una economía verde y sumar “valor ambiental” a las exportaciones del país. Sin embargo, Castro advirtió que para alcanzar estos objetivos es fundamental la implementación de políticas públicas que fomenten la competencia y permitan inversiones en innovación tecnológica, escala e integración de la cadena agroindustrial.Con estos avances, Argentina se posiciona como un actor relevante en la transición hacia combustibles más sostenibles, alineada con las tendencias globales y aprovechando sus recursos naturales para contribuir a la reducción de emisiones a nivel mundial.COMENTÁ EN FACEBOOK: HACÉ CLICK ACÁ