xCon la excusa de la “justicia social”, los ministros de Economía de Brasil, Alemania, España y Sudáfrica propusieron la creación de un impuesto mundial a los multimillonarios para implementar políticas que permitan luchar contra desigualdad y combatir el cambio climático.En una columna de opinión en el diario El País de España titulada “Impuestos a los superricos: Una nueva agenda para luchar contra la desigualdad a nivel mundial”, los ministros afirmaron: “Aunque la disparidad entre los países más ricos y los más pobres se ha reducido ligeramente, la diferencia sigue siendo alarmantemente alta”, y argumentaron que la brecha de ingresos entre el 10% más rico y el 50% más pobre “casi se ha duplicado”.Los firmantes del texto son la ministra de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania, Svenja Schulze; el ministro de Finanzas de Brasil, Fernando Haddad; el ministro de Finanzas de Sudáfrica, Enoch Godongwana; la vicepresidente primera y ministra de Hacienda de España, María Jesús Montero; y el ministro de Economía, Comercio y Empresa de España, Carlos Cuerpo.Advirtieron que “las actuales tendencias económicas mundiales plantean serias amenazas al avance hacia una mayor igualdad” ya que -de forma insólita- afirmaron que la desigualdad de oportunidades “se transmite de generación en generación”.Sostuvieron que la permanencia en la desigualdad mundial “perjudica el desarrollo económico porque inhibe la innovación e impide que las personas desarrollen todo su potencial”.”Brasil ha hecho de la lucha contra la pobreza y la desigualdad una prioridad de su presidencia del G20, una prioridad que también persigue la política de desarrollo alemana y que España ha abordado ambiciosamente tanto a nivel nacional como mundial. Al destinar dos tercios del gasto total a servicios sociales y apoyo a los salarios, además de calibrar la administración de la política tributaria, Sudáfrica sigue teniendo como objetivo un programa fiscal y tributario progresivo que haga frente al legado de desigualdad de renta y riqueza del país”, manifestaron en la nota.”Brasil llevó por primera vez a la mesa de negociaciones de las principales economías del mundo una propuesta de impuesto mínimo global a los multimillonarios”, comunicaron, y proponen un gravamen mínimo del 2% para aproximadamente 3.000 multimillonarios.Explicaron que no se aplicaría “a los multimillonarios que ya contribuyen una parte justa en el impuesto sobre la renta. Sin embargo, aquellos que consigan eludir el pago del impuesto sobre la renta se verían obligados a contribuir más al bien común”.Aseguraron que permitirá mejorar “la capacidad de nuestros sistemas tributarios para cumplir el principio de equidad, de forma que las contribuciones se ajusten a la capacidad de pago” y que “un gravamen mínimo mundial coordinado sobre los multimillonarios constituiría un paso significativo en esta dirección”, ya que “aumentaría la confianza en la eficacia de la redistribución fiscal”.Este impuesto “desbloquearía potencialmente unos ingresos fiscales adicionales de 250.000 millones de dólares al año en todo el mundo”, señalaron. Para cerrar, indicaron que la desigualdad “requiere un compromiso político, un compromiso con los objetivos de una cooperación fiscal internacional inclusiva, justa y eficaz”.